A diferencia de lo que señaló Alfonso Méndez Plancarte respecto de las letras del México virreinal, y a las que habría de denominar como , las obras de los poetas hispanomexicanos -es decir, la poesía escrita por los hijos - deben de incorporarse con pleno derecho y razón a las letras mexicanas, puesto que son y han sido escritores mexicanos por vida, experiencia, educación, intereses, actividades e imaginación.