El gran potencial analítico-crítico de los estudios post-coloniales para investigar la relación entre cultura y política, así como los nuevos enfoques que ofrecen para transformar varios aspectos de la cultura moderna, han aumentado el interés en dichos estudios. Esta excelente obra -válida para estudiosos, críticos y estudiantes- pretende satisfacer la palpable falta de trabajos sobre este punto en el Estado español.